Preparativos para campamentos

¿Qué hace falta?

Lo primero que nos marca lo que tenemos que preparar para un campamento de verano es la duración del mismo, su naturaleza y la zona en la que se encuentra. De todas maneras, lo más normal es que recibas por parte de la organización del campamento una lista "base" adaptada a la estancia unas semanas anteriores del comienzo. Sigue al pie de la letra las recomendaciones de los profesionales. Su experiencia te será muy útil a la hora de preparar la mochila.

Debes estar particularmente atento a las recomendaciones concernientes al tipo de equipaje (¿mochila obligatoria?), al material necesario de deporte (zapatillas de montaña, bañador, raquetas,...), a lo necesario para la vida diaria (chaqueta, toallas,...). Infórmate de si se va a lavar la ropa de los niños allí, para prever llevar más o menos ropa interior, etc. Se vaya o no a lavar la ropa, no olvides marcar toda la ropa para que se diferencie bien.

También debes informarte de si los objetos de valor (dinero, cámara de fotos, móvil,...) están autorizados y de estarlos, si son los niños los responsables de guardarlos. Lo más simple es limitar al máximo estos objetos, particularmente los que tienden a enfrentar a los niños (lector mp3, consola de juegos) y que podrían incluso acarrear problemas graves (celos, robos, pérdida).

Finalmente, debes saber que no todos los campamentos permiten ir a los niños con el móvil debido a la dificultad de gestión que esto implica. Si lo necesitaran, los niños pueden utilizar el teléfono del centro. Los primeros días puede que el niño te llame con algunas observaciones negativas del campamento y con sollozos, pero no te paniques y toma la situación con calma. Para saber si verdaderamente hay un problema, ponte en contacto con el director del campamento.

Despedida

Debemos reconocer que la angustia que sentimos los padres cuando el niño se marcha por primera vez es igual o incluso mayor que la que siente el pequeño. Pero debemos ser fuertes y darle mucho apoyo moral al niño, que lo necesita. Es la primera vez que viaja sin vosotros y los nervios, probablemente, están a flor de piel. En vísperas a la partida, haz que el niño valore al máximo la experiencia que está a punto de vivir y explícale que la tristeza que siente es por la separación, y no por el campamento. La tristeza se pasará pronto gracias a la diversión del campamento.

Algunos consejos para animarle: enuncia muy claramente la fecha de vuelta y las condiciones en las que irás a buscarlo ese día. Queda con él en que le llamarás a los dos días de su partida (prevén a los animadores) o que le mandarás correos. También puedes confiarle algún objeto fetiche: un pañuelo perfumado, un amuleto, una foto,... Finalmente, cálmalo haciéndole ver el carácter pasajero de esta tristeza y el espíritu lúdico del viaje. ¡Tan pronto como esté allí, rodeado de nuevos amigos, descubriendo nuevas actividades, no pensará más en vosotros!